Parque del Pasatiempo · Betanzos

Descripción

Para disfrutar de un día en un parque curioso a la par que didáctico, rodeado de arquitectura, escultura, cerámica y jardinería, el parque del Pasatiempo es una estupenda opción. Del proyecto original se conserva hoy tan sólo una décima parte. Se trata de una serie de vestigios y espacios restaurados que se hallan en la misma ladera en la que fueron depositados durante las distintas etapas de su construcción

Historia

El proyecto de este magnífico parque enciclopédico, idea de Juan García Naveira, un betanceiro que como tantos gallegos a mediados del siglo XIX emigra a Argentina y que en pocos años consigue amasar una inmensa fortuna y regresa a su tierra natal Betanzos para invertir en ella, cuenta con una parte antigua y otra de reciente construcción conformada por zonas verdes, estanques, grutas subterráneas, un auditorio al aire libre y una zona infantil de juegos.

Pese a que muchos creen que la obra lleva el sello de los hermanos Naveira debido a la costumbre de verlos haciendo varias obras conjuntamente por el bien de su comunidad como fueron el asilo en el año 1912 o la escuela en 1914, la construcción del parque, iniciada en 1893 fue obra exclusiva de D. Juan García.

La obra del parque se prolongó hasta el año 1914. No obstante, siguió remodelándose durante todos los años de vida del Sr. Naveira. agregando constantemente nuevos elementos al entorno, de hecho, no dejó de ampliarse hasta la muerte del señor Naveira.

El Parque del pasatiempo cubría unos 90.000 metros cuadrados recuerda el estilo de los jardines ingleses románticos. En la inauguración del parque, el Pasatiempo ocupaba una superficie cuatro veces mayor de lo que se conserva en la actualidad.

A la muerte de Don Juan en el año 1933 comenzó la decadencia del parque. En la posguerra quedó en estado de abandono y sucumbió a varios actos vandálicos y robos. En la década de los40 se realizó la construcción de una carretera que cruzaba a través del parque, separándolo y dejando por una parte los jardines y por la otra las construcciones del Pasatiempo. El jardín se reconvirtió en deposito de escombros y en huerto, hecho que terminó de estropear casi por completo las estatuas, estructiras y relieves.

En 1986 el Ayuntamiento compró el parque para tratar de reconstruirlo y hace poco dieron comienzo las obras de restauración y rehabilitación de la superficie que aun se conserva con la ayuda de fondos europeos

El recorrido

Hace muchos años, para poder acceder al parque, se tenía que pasar por la Casa Taquilla, edificio que se conservó hasta los años 90 y cuyos ingresos se destinaban a conservar el parque.

Una vez se pasaba por la taquilla, se acceía a una gran verja que nos recuerda a la que se puede ver en el Palacio de Versalles. Junto a ella, a cada lado, dos leones de mármol, uno dormido y el otro al acecho.

El parque del pasatiempo en sí, cubría unos 8000 metros cuadrados que se distribuían en 5 niveles que aprovechaban el nivel de la montaña y que están conectados por escaleras al aire libre, así como también por pasadizos sinuosos a traves de impresionantes grutas artificiales que imitaban grutas prehistóricas en las que actualmente aun se conservan las figuras de dos dinosaurios.

Todos los niveles disponían de zonas ajardinadas. En el primer nivel destacaba el Lagar, homenaje a Argentina, pero el lugar más emblemático sin duda alguna es la reproducción del Estanque del Retiro. Tenía una isla con un templete oriental en su centro y bajo él dos mujeres vaciando sus cántaros inagotables.

Encabezando la isla se puede observar la Torre de Hércules, de la que desaparecieron los tramos superiores rodeándola con una canoa con la figura de dos indios remando y otras tres embarcaciones. La mitad de sus paredes eran un empedrado de moluscos y conchas. Se podía bajar al estanque por unas escaleras preciosas. Incluso se podía caminar por la orilla de sus aguas, pisando losas de piedra que se habían colocado allí.

Entre los distintos murales que tenemos en las paredes cabe destacar los que señalan sus viajes como la Pirámide de Keops, con sus medidas, conocer Grecia, Italia y Egipto en aquella época era conocer las tres culturas y el sueño de cualquier intelectual que se preciara. Las figuras de Juan García, con Doña María y si hija Agueda subida a los dromedarios con sus guías es una de las que más llama la atención

Y de lo más retratado del parque que aun se conserva son los 41 relojes que dicen que marcan los husos horarios. Aquí se ve un guiño al país que los hizo ricos, Argentina, además el reloj es de una prestigiosa marca de ese país. En aquellos tiempos se utilizaban los relojes de sol, pero una vez más demuestra el carácter pedagógico hacia el pueblo, estos relojes se utilizaban para enseñar las horas, por eso cada uno marca una hora distinta que nada tiene que ver con los husos horarios.

Cómo llegar

El Parque del Pasatiempo se encuentra en Betanzos, en la provincia de A Coruña. Para llegar hasta el recinto tendremos que ir hasta la Av. de Fraga Iribarne a la altura del número 63, pero hay que tener en cuenta que en las inmediaciones existe un gran parking gratuito por lo que compensa dejar allí el coche y acercarse caminando.